Cuando estás embarazada por primera vez todos te dicen mil cosas, te dan mil consejos, opinan de todo pero nadie te dice que a partir de que nazca tu bebé te sentirás culpable muy a menudo.
O te harán sentir culpable.
Cuidar a un bebé es un trabajo de 24 horas, créeme. Todo lo que demás es un extra que harás cuando puedas y como puedas. Si es que puedes.
¿Cuántas cosas a la vez tienes que hacer en un trabajo normal? Una.
¿En cuantos trabajos estás 24 horas al día sin saber cuando vas a dormir, comer, ducharte o hacer pis todos los días del año? Legalmente, en ninguno.
¿Entonces quién demonios ha dicho que las mamás tenemos que hacerlo todo y por encima bien?
La gente es muy ligera hablando. Culpar a la madre es lo más fácil porque la ignorancia dice que todos, pero todos los bebés son iguales así que lo mínimo que haga fuera de tiempo o lugar tiene que ser culpa de la madre.
No, no y no. Ólvidate, chica.
¿Qué se creé la gente que hacemos las mamás en casa? ¿La manicura, ver fútbol?
Cada bebé es distinto y sus necesidades son distintas. ¿Tu tienes la misma sed y al mismo tiempo que tu marido o tu madre o tu hermana? ¿Por qué iba a ser distinto con los bebés?
Dan mucho trabajo que sumado al trabajo de la casa y a tu trabajo remunerado cuando te reincorpores se te harán cuesta arriba. Una cuesta muy inclinada y de la que no se ve el final.
Por supuesto que hay niños muy tranquilos pero aún así dan trabajo. De los que son más intensos no te quiero ni contar.
Tú y tu pareja tomaréis decisiones con las que no todo el mundo estará de acuerdo. ¿Y qué? Todos hacemos lo que podemos y tomamos las decisiones que creemos más acertadas. Podemos equivocarnos pero debemos respetar las decisiones de los demás y exigir que respeten las nuestras.
Respeto y tolerancia.
No tienes que contentar a toda la humanidad ni darles explicaciones siquiera. Tampoco eres responsable de todo lo que les pase y hagan tus hijos. Solo faltaba.
Las mamás NO tenemos que disculparnos por…
- Por dar el pecho a tu bebé.
- Por no dar el pecho a tu bebé.
- Por darle papillas a tu bebé.
- Por elegir el BLW (20 alimentos fantásticos para empezar aquí)
- Porque la limpieza de tu casa no sea muy buena últimamente.
- Por ir despeinada.
- Por llevar la ropa sin planchar.
- Por la hipersensibilidad emocional. Las hormonas te la jugarán más de una vez, aprovecha y desahógate.
- Por estar cansada.
- Porque se te olviden las cosas. Para las despistadas habituales esto de dormir poco nos viene hasta bien como excusa.
- Por no dar abasto. Reduce mejor tu lista de quehaceres.
- Porque tu peque se haya manchado.
- Porque tu seas la manchada u otra persona.
- Por que el bebé interrumpa las conversaciones.
- Por no tener una vida social como antes o ninguna vida social.
- Por preferir dormir a cualquier cosa.
- Por querer recuperar tu figura pre-embarazo o porque no te importe demasiado no recuperarla.
- Por no querer aún o nunca más hijos o por quererlos ya.
- Por querer respetar los horarios y ritmos de tus hijos.
- Por no agujerear las orejas de tu niña o por hacerlo.
- Por no ponerle zapatos a tu bebé. Es lo recomendado.
- Por como van vestidos tus hijos.
- Por no querer taparlo más o menos.
- Por tener que cambiarle el pañal en cualquier momento o lugar a tu bebé.
- Por que se enfermen.
- Por que rían y jueguen.
- Por besarlos y abrazarlos.
- Por no pasar de ellos.
- Por jugar y reír con ellos.
- Por disfrutar de ellos.
- Por preferir estar con ellos a vuestro rollo.
- Por las siestas con ellos.
- Por hacer planes solo con ellos y papá.
- Porque las comidas últimamente no sean de lo mejor que has hecho (sin sal, con demasiada sal, medio crudo, pasado…).
- Porque la comida esté tarde o no esté siquiera. ¡Qué vivan los bocadillos y la fruta!
- Por dejar a los peques con papá o los abuelos e irte a tomar un café con tus amigas, hacer la compra tu solita, correr, pasear…
- Por pasar de la gente.
- Por volver al trabajo.
- Por dejar tu trabajo para criarme.
- Por criarme como crees que es mejor.
- Por portearme cerquita.
- Por llevarme en carrito.
Se realista y desconecta un poco de lo que el mundo quiera o diga. Son tus hijos y es tu vida. Tú (y tu pareja) no tenéis que dar explicaciones a nadie.
Piensa que quién te dice algo demuestra poco respeto y confianza en vuestras decisiones (o quizá es en las suyas en las que no confía y ataca para disimular, ¡típico!). Díselo. También hay gente muy intolerante con los demás que no merecen ni una pizca de tu tiempo.
Criar a los hijos de los demás es muy fácil…de boquilla.
Pero tu peor enemiga serás tú y tu autoexigencia. ¿Limpiar o jugar, amamantar, mecer… a tu peque? Prioriza sin remordimientos.
Ah, y la porquería no se irá a ningún lado, esperará.
Lo sé. Jajajaja.
¿No eres perfecta? ¿No puedes controlarlo todo?
Bienvenida al club.
Ahora que lo tienes claro, lo dicho: disfruta.
¿Por qué te has sentido o te han hecho sentir culpable en tu maternidad?